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jueves, 19 de mayo de 2011

De la imposibilidad de distinguir la vigilia del sueño

Imágenes propiedad de Hergé/Moulinsart.
En rigor, es imposible distinguir la vigilia del sueño. El sueño es entendido como tal desde el horizonte de la vigilia. Pero la vigilia no tiene un referente superior para poder afirmarse a sí misma. Es un acto de fe.

En algunas aventuras de Tintín se da también este problema ontológico. Hergé adopta el mismo estilo de dibujo tanto en los sueños de Tintín como en la vigilia. De modo que, poniéndonos muy puntillosos, no es fácil discernir lo soñado de lo real. Hay un álbum donde la sombra de la sospecha es especialmente alargada; La estrella misteriosa.

Tintín mira por el telescopio del observatorio y sufre una experiencia horrorosa. Ve una araña gigante. El fin del mundo…una araña enorme

Vuelve a su casa. Se tumba en el sillón y…tras un estruendo, aparece el profeta. Profetiza la llegada de una araña enorme.

Imágenes propiedad de Hergé/Moulinsart.
La siguiente viñeta es desconcertante. Intuimos que se ha tratado de un sueño (como lo intuimos cuando Rascar Capac entra en la habitación de Tintín en Las siete bolas de cristal).
Lo que sigue es un álbum extraño, psicodélico, surrealista…como un sueño. Personajes especialmente singulares, sombras de siluetas, estallidos, setas gigantes…

Tintín llega al aerolito. Se acuesta allí. Y se duerme.


Imágenes propiedad de Moulinsart.

De nuevo un estruendo. Tintín ...¿despierta?. Y aparece una araña enorme. ¿Es todo el álbum una especie de sueño? Imposible saberlo, el problema ontológico de la vida real es extrapolable al episodio. Solo una cosa está clara.

Imágenes propiedad de Hergé/Moulinsart.
Se cumple la profecía del profeta soñado.

4 comentarios:

  1. Curioso. Nunca había reparado en ello; habrá que repasar todos los sueños de Tintin.
    Donde sí distingue formalmente los sueños es en El Templo del Sol, cuando secuestran a Zorrino (sueño, por otro lado, relacionado con una viñeta eliminada en la que un palo con una calavera se les cruzaba en el camino).

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  2. Cierto. Tambien en Joyas, Tíbet o Arte-Alfa Hergé deja claro qué escena es soñada. Pero de 7 bolas para atrás no suele hacerlo. Lo onírico guarda un papel fundamental en la obra, algún día lo comentaremos.

    Muchas gracias por comentar, Mil Rayos.

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  3. Ese libro de Hergé y los filósofos no lo escribirías tú...?...:):)

    A mi, los sueños que dibuja Hergé me resultan especialmente cercanos, o todos soñamos lo mismo, o el Maestro llevó la línea clara hasta lo más hondo del subconsciente...

    Fantástico análisis como de costumbre.

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  4. Es muy curioso lo que comentas del subconsciente. Siempre he pensado que esta obra tiene algo que apela constantemente al subconsciente. Es un tema algo complejo, tal vez haré una entrada algún día...

    Muchas gracias por comentar Arte-Alfa.

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